Phil Knight, fundador de Nike, escribió una autobiografía titulada Shoe Dog (Nunca te pares), en la que cuenta como llegó a crear una de las marcas más importantes del mundo. Es un libro cargado de fuertes emociones, en la que Phil narra como pasó de ser un joven inquieto con una idea loca, a líder de un emporio de influencia mundial. A continuación, las 10 frases que más nos impactaron del libro:
- “Como todos mis amigos, soñaba con ser exitoso. A diferencia de mis amigos, no tenía claro que significaba eso. ¿Dinero? Tal vez. ¿Esposa? ¿Hijos? ¿Casa? Claro, si tenía suerte. Estas eran las metas que me enseñaron a aspirar, y una parte de mi aspiraba a ellas de forma instintiva. Pero en lo más profundo de mi ser estaba buscando otra cosa; algo más. Sabía que nuestro tiempo era corto, más corto del que pensamos, corto irse correr temprano en la mañana, y quería que la mía tuviera un significado. Tuviera un propósito. Una importancia. Y sobre todo…que fuera diferente. Quería dejar una marca en el mundo. Quería ganar.”
- «¿Y si hubiera una forma, sin ser atleta, de sentir lo que los atletas sienten? ¿Jugar todo el tiempo, en vez de trabajar? O de alguna manera disfrutar del trabajo tan intensamente que esencialmente se convierte en la misma cosa.»
- «Vislumbré mi idea local brillando mas allá, y no se veía tan loca. Ni siquiera parecía una idea. Parecía un lugar. Parecía una persona, o una fuerza vital que existía mucho antes que yo, que estaba separada de mí, pero que también era parte de mí. Me esperaba, pero también se escondía. Eso podría sonar un poquito fuera de este mundo. Pero así era que se sentía en el inicio.»
- «Yo era un pensador lineal, y de acuerdo a la tradición Zen, el pensamiento linear no es más que una ilusión, una de las tantas que nos mantienen infelices. La realidad no es lineal, dice el Zen. No hay pasado, no hay futuro. Todo es ahora.»
- «Eres recordado por las reglas que rompes.»
- «Nuestro trabajo es nuestra parte más divina. Todos estamos orgullosos de nuestro trabajo. Si hasta Dios habla de su trabajo, imagínense cuanto debería hablar el hombre.»
- «No le digas a las personas como tienen que hacer las cosas. Diles lo que tienen que hacer y deja que te sorprendan con los resultados.»
- «Nunca fui un vendedor. Yo creía en el running. Yo creía que, si las personas salían de sus casas y corrían unas cuantas millas todos los días, el mundo sería un mejor lugar, y creía que estos zapatos eran los ideales para hacerlo. Las personas, sintiendo mi creencia, querían un poco de esa creencia para ellos mismos. Creer, decidí. Creer es algo irresistible.»
- «Aprendí del atletismo que el arte de competir era el arte de olvidar. Debes olvidar tus límites. Debes olvidar tus dudas, tu dolor, tu pasado. Debes olvidarte de esa vocecita interna que te grita, que te ruega, “¡ni un paso más!” Y cuando no es posible olvidarlo, debes aprender a negociar con ello.»
- «Los cobardes nunca empezaron, y los débiles se murieron en el camino. Eso nos deja a nosotros.»