Considerado por muchos emprendedores y dueños de negocios como el mejor libro jamás escrito sobre el tema, “El mito del emprendedor” se ha vuelto asunto de leyenda. Con más de 150,000 copias vendidas y traducido a más de 27 idiomas, este pilar de información es un valioso recurso para cualquier etapa del camino del que emprende, y destila una sabiduría difícil de replicar. A continuación, las 5 enseñanzas básicas del libro “El mito del emprendedor”, por Michael E. Gerber:

1. El mito: si entiendes la parte técnica de un negocio, por ende, entiendes el negocio. Este es una de las suposiciones fatales que cometen los emprendedores, ya que el aspecto técnico de una empresa, y la manera en que opera ese negocio, son dos cosas totalmente diferentes. Para que tu negocio funcione, no puedes pensar que, porque conoces a fondo la parte técnica, tendrás el éxito asegurado

2. Todo el que empieza un negocio está dividido en tres: el emprendedor, el técnico, y el gerente.

  • El emprendedor vive en el futuro; nunca en el pasado; raramente en el presente. Se encuentra feliz cuando lo dejan construir sus imágenes del “que será”. En los negocios, el emprendedor es el innovador, el estratega, el creador de nuevos métodos. Dada su necesidad de encontrarse en constante estado de cambios, el emprendedor mantiene inquietos a todos los que enlista para su empresa. Para resumirlo, el emprendedor construye una casa, y desde que la termina, empieza a planear la siguiente.
  • Al gerente le gusta el orden, y donde el emprendedor vislumbra oportunidades, el gerente ve problemas. El gerente es el que corre detrás del emprendedor resolviendo los líos, pero sin el emprendedor, no existieran líos para que el gerente resuelva.
  • El técnico es al que le gusta hacer, siempre con su mantra cerca del corazón: “si quieres que las cosas se hagan, hazlas tú mismo”. Mientras el técnico está trabajando, es feliz, siempre y cuando sea una cosa a la vez. Él sabe que no puede hacer varias cosas simultáneamente, así que se siente pleno cuando controla su ritmo de trabajo.

3. Si estas tres partes estuvieran balanceadas, estuviéramos describiendo al individuo perfecto. Pero la realidad es que este individuo no es común, y la mayoría de los que emprenden tienen algún lado más desarrollado que otro, y de ahí, la necesidad de buscar un sistema que permita y estimule este balance.

4. Lo ideal es crear un negocio que sea estructurado sobre sistemas, y no estructurado sobre personas. De esta forma, el sistema maneja el negocio, y las personas manejan el sistema. La genialidad detrás de emprendimientos que funcionan no está en el trabajo que se realiza, sino en el diseño de un sistema que asegure que ese trabajo podrá seguir emulándose de la misma forma a través del tiempo, y la única manera de lograr eso es a través de sistemas.

5. El sistema no es algo que se trae a la empresa; es algo que se deriva durante el proceso de crear la empresa. Para el emprendedor, este modelo es el medio a través del cual la visión se materializa en el mundo real. Para el gerente, es la única manera de proveer el orden y la predictibilidad del negocio. Y para el técnico, es la única manera de liberarlo para que pueda hacer la actividad que ama: el trabajo técnico.

La semana que viene desarrollaremos más el tema central de este fascinante libro, para que así podamos utilizar sus enseñanzas y aplicarlas a nuestros emprendimientos.

Leave a Reply